Este teclado, llamado Yama, cuenta con retroiluminación RGB que puede ser personalizada según las preferencias del usuario para brindar comodidad. El software exclusivo de Redragon permite ajustar todos los aspectos configurables del teclado, desde la iluminación hasta las teclas G programables. Además, tiene capacidad para almacenar hasta cinco perfiles en su memoria interna. Equipado con tecnología Outemu, específicamente con switches Outemu Purple que ofrecen una activación suave con tan solo 62 gramos de fuerza, el Yama garantiza precisión en cualquier tarea. Su estructura de aluminio lo hace robusto, y las teclas, fabricadas con inyección láser de doble disparo y grabadas posteriormente, aseguran durabilidad y calidad, ideal para un uso intensivo. El cable resistente soporta hasta 12 kg de carga continua y 10.000 flexiones bruscas. Además, su diseño cuenta con protección antisalpicaduras para evitar daños por derrames accidentales, con un sistema que drena el líquido hacia la parte posterior del teclado. Por último, pero no menos importante, todas las bases de los teclados Redragon están equipadas con antideslizantes para mantener el periférico estable en cualquier superficie.
